Por qué 'ellas' no pescan

[jesuspesca]

Siempre que hago alguna pregunta en el foro me entra el complejo de 'aprovechao' y me digo que debería escribir algo para compensar, asínque voy a ello. Hay un tema que hace tiempo que quería plantear y es el de las mujeres.
Me he estado documentando y he visto que hay algunos posts donde se ha tratado de forma más o menos directa; por ejemplo, los temas de la incompatibilidad de ambas pasiones, la necesidad de negociar ...
Pero me gustaría dar una vuelta más de tuerca con un par de asuntos que creo que no se han tratado a fondo; a lo peor me equivoco, pero el foro es demasiado grande para mi y no soy todo lo asiduo que debiera.

El primero es pensar un poco en los motivos. ¿Por qué la pesca es un deporte de machos?. Es verdad que de vez en cuando sale alguna mujer aficionada, pero en muy pocos casos la cosa llega al nivel de enfermedad tan común por aquí; además, casi siempre es una afición adquirida a través de la pareja; es decir, 'ella' pesca porque 'él' pesca; y en todo caso, ya digo, no suelen llevarlo al grado de vicio babeante como hacemos los hombres.
Voy a apuntar algunos motivos que se me ocurren, y me gustaría que l@s demás dieran su opinión; por supuesto, las aportaciones de ellas seguramente serán las más sustanciosas. Bueno, ahí van:

1.- La típica explicación histórico-antropológica: El macho es el que se dedica a la caza y siente afinidad por el contacto con la naturaleza; perseguir a la presa, etc. La hembra se queda en la cueva con la crías. Por eso los chicos juegan al balón e interactúan a pedradas mientras que las chicas juegan a las muñecas y son capaces de conversar durante horas.
Según esta explicación el intentar que tu pareja se aficione a la pesca es una batalla casi perdida.

2.- La típica explicación cultural: Al niño se le da una escopeta y una caña para jugar y a la niña una muñeca de trapo. Pescar es cosa de hombres.
Según ésto habría esperanzas de readaptación; sobre todo si la mujer ha recibido una educación poco sexista.

Bueno, estos son los motivos típicos y facilones, pero no por ello hay que pasarlos por alto. Vamos ahora con algunos aspectos prácticos:

3.- Seguridad: Una vez le conté a una compañera de trabajo que una vez caminé una hora de noche por la orilla de la carretera para llegar a una recula en un pantano al amanecer.
Ella me dijo que me envidiaba, porque para ella no era factible hacer eso. Efectivamente, una mujer sola caminando por una carretera en medio de la noche con una caña en la mano es inhabitual; y muchas de las cosas que hago cuando voy de pesca: dormir en el coche o pasar el día completamente solo en lugares remotos no son recomendables para una mujer.
Espero que no suene paternalista y que nadie piense que me parecería mal que lo hicieran; todo lo contrario; pero me parece inseguro; por favor, corregidme si me equivoco.

4.- Acoso: Relacionado con el punto anterior pero con otro matiz. Una pescadora solitaria seguramente sería acosada de manera más o menos cargante por todo lo que tuviera pito que se cruzara por delante.
Cuando recorro la orilla y me cruzo con pescadores, los encuentros son fugaces. Con los educados intercambio el saludo y quizá algún comentario sobre si pican y esas cosas. Con alguno más enrrollao puede que haya algo más de conversación; pero al rato cada un sale por su lado.
Si yo tuviera tetas no creo que la cosa fuera tan breve; imagino que tendría que aguantar desde pesados hasta graciosillos pasando por los que son demasiado simpáticos o demasiado groseros. En resumen: falta de naturalidad y posibles molestias.

Motivos sicológicos.
En cualquier caso el punto clave yo creo que es el interés. Para mi está muy claro que a todas las mujeres que conozco la pesca les parece algo tremendamente aburrido. Eso es por desconocimiento, pensarán algunos; pero ese mismo desconocimiento implica en la mayoría de los casos un desinterés mayúsculo. Por ejemplo, a mi señora le importa un pito si pesco los lucios con el paseante o con un popper; de hecho le importan un pito paseantes poppers y lucios; me 'deja' ir a pescar porque sabe que me gusta, pero la mística del asunto le trae sin cuidao.
Si diéramos con la raíz del desinterés tendríamos la clave de tan apasionante problema. De hecho, me gustaría conocer la opinión de las féminas: ¿alguna de vosotras se considera adicta a la pesca como el qué más?; ¿o nos mirais con una mezcla de superioridad y compasión pensando 'hay que ver cómo se entretienen con sus juguetitos'?. Por ierto, ¿se pone 'hay que ver' o 'ay que ver'? ... preguntas, preguntas.

El segundo tema a tratar era un comentario sobre el aspecto sociológico del foro en relación a las mujeres; pero eso lo voy a dejar para otro día, para no hacer el post demasiado largo.

Saludos.

[AMBRA]

Muy interesante el tema Jesus, la cosa es bastante compleja y se debe por todo lo que dices, a cada una por un punto o por varios.

Jesus yo añadiría otro punto y creo que bastante importante y esta relacionado con todos los demás, si alguna compañera empieza a pescar o cazar pronto pierde la afición por falta de otras mujeres que practiquen y con las que compartir experiencias con la confianza que da hacerlo con el mismo sexo ( compartir experiencias, mal pensados) , por desgracia. 

Si se juntaran 3 o 4 de nuestras chicas a pescar y mientras charlaran de sus cosas y de la pesca seguro que nos tocaría quedarnos en casa mientras ellas cañean.

Tengo una prima que su padre le regalo mas de una caña y escopeta, su padre tiene barco y se la llevaba desde pequeña a pescar y cazar, tenia todos los permisos y licencias incluso el PER pero cuando tuvo cierta edad y ninguna de sus amigas compartieron su a ficción pues se lo dejo.

Si muchos chicos que tienen la afición ya heredada de sus padres y son varios amigos que salen juntos a pescar, cuando llegan a la edad de gustarles la marcha y empiezan a picarles los lereles abandonan la pesca, imaginate ellas que tienen todas estas cosas en contra. 

[Caduf]

Me viene a la cabeza una embarcación en la desembocadura del ebro, con 2 mujeres pescando a mosca cerca de la orilla.
En el caso de mi mujer, nunca ha tenido ni conocimiento ni interés, ella va a su tai chi y yo a mi tiquitaca. A veces le cuento mis experiencias casi misticas al amanecer y le atrae, pero no soporta ver al pez muriendo, a mi me pasa algo parecido con la caza, pero claro mi padre es pescador y lo he mamado desde peque.
Mi hermana que si lo lo ha mamado como yo, tampoco fué enseñada, pero recuerda aquellos dias que íbamos a pescar a la Badum con toda la familia, como los dias mas felices de su vida.
Creo que hay de todo un poco, y que sencillamente es la suma de todo lo que comentas, al igual que en los micropuntos y en tantas cosas de la vida, no es solo un factor el que lo resuelve.
Por cierto lo correcto es 'hay que ver'.

Que no os falle la salud.

[Enol]

Lo de la compañia de otras mujeres es un punto clave. Tengo la suerte de que a la jefa le gusta la pesca y a la del compañero habitual de pesca, tambien (no como a nosotros, pero les gusta). En ambos casos, una de las primeras preguntas suele ser "¿va x?" (sustituir x por la parienta respectiva).

De todas formas, aun conociendo a unas cuantas mujeres a las que les guste la pesca, a ninguna la veo con la fiebre que nos entra a nosotros, que si tenemos 5 dias libres, los 5 iriamos a pescar pegandonos madrugones, mojaduras, caminatas, golpes.... para acabar sacando igual una triste furagaña y volver mas contentos que un tonto con una piruleta

[Hunter]

Creo que habría que preguntarselo a ellas.
Pienso que el principal problema es la seguridad en sitios solitarios.

Pongo un artículo muy ingenioso de una vieja revista:

LA MUJER Y LA PESCA. Emilio Fernández Román.

La pesca, además de afición y más que una actividad, es una especie de vicio, adicción o comunidad del pescador con el agua y el pez, que suele acarrear numerosas y molestas implicaciones.
     La pesca es una especie de sacerdocio y, como tal, exige vocación y celibato, es evidente que un hombre casado jamás llegará a la perfección en la pesca. Pero también, y en contra de una creencia bastante popular, no es un deporte machista, aunque a primera vista pueda parecerlo; existen y han existido excelentes pescadores del género femenino, aunque por principio estas no cuentan. Nos referimos a la mujer en sentido intrínseco, concretamente a la mujer que no siente afición ni comparte la de su consorte.
Porque la mujer del pescador, con alguna honesta excepción que puede confirmar la regla, supone un elemento negativo para la pesca, y las hay de todo tipo; resignadas, complacientes, cooperantes, positivas, insatisfechas, negativas, intransigentes y temerarias.  En general, casi todas atraviesan por una larga adaptación, que suele comenzar por un gran interés, sufre una etapa de buena voluntad y gran resignación y, en el mejor de los casos termina por el desdén más absoluto.
     Y casi todas ellas suelen pasar por alguno de estos estados en algún momento de su vida, porque un verdadero pescador, un pescador cien por cien, un pescador vocacional; habla, vive, piensa y descansa, por y para la pesca; y se justifica diciendo que su afición es una actividad sana y con la que no causa ni hace daño o mal a nadie, excepto a los peces, claro ésta, pero estos, como ya dijeron los romanos, son res nulius, cosa de nadie, por lo que el tema carece de importancia.
     Le relaja y permite respirar aire no contaminado, por lo que le resulta un tanto extraño que por unos cuantos fines de semana al año, cincuenta y dos para ser exactos, se le acuse de egoísmo.
     Pero esta es la cruda realidad, realidad que no tiene remedio, paliativo ni solución capaz de satisfacer a ambas partes.
     Durante algún tiempo el matrimonio funciona mientras la mujer muestra el aspecto complaciente y positivo, pensando de forma inocente, error muy común, que se trata de un pequeño vicio de juventud que se pasará con los años; posteriormente pasa al estado cooperante y resignado, nos acompaña pero no llega al río; después suele aparecer un periodo negativo de intransigencia e insatisfacción, momento verdaderamente peligroso, ya que puede hacer caer al pescador, si este no tiene la vocación firme, en un infame sentimiento de culpa no merecida, lo que le puede hacer llegar a pensar en abandonar la pesca; pero ya que el pescador no renuncia a lo prohibido ni pasa de prohibiciones, el pescador se resigna a vivir con el remordimiento, y esto anula los efectos positivos que el ejercicio de la pesca puede proporcionar, llevando incluso a problemas coronarios, úlceras e incluso daños cerebrales.

     En la primera época suelen preparar, ordenar, ayudar, e intervenir en cualquier salida de pesca, e incluso nos acompañan; admiran los peces que capturamos y se entristecen con los que perdemos, siempre enormes. Son incluso capaces de limpiar los peces que pescamos y hasta cocinarlos.
     La etapa de buena voluntad se caracteriza de una forma diferente; sí, nos acompañan en alguna ocasión, pero aquí termina su papel, se quedan en el hotel y se aburren, se aburren hasta la saciedad, incapaces de comprender como podemos estar en el río hasta las once de la noche esperando un sereno que no siempre se produce.
    Pasado este período, surge el temerario; aquel de "la pesca o yo"; es el momento cumbre, decisivo y fundamental, ya que ella no sabe exactamente lo que se juega, y al igual que cualquier mártir, el verdadero pescador se sacrifica, y con harto dolor prescinde de ella; de la mujer, no de la pesca, por supuesto.


     Hace unos meses encontré a un viejo amigo que vive cerca de la Coruña, y su saludo fue el siguiente:
- Me quedé viudo hace seis meses, podemos ir de pesca cuando quieras.
     Los buenos pescadores o son solteros, o están separados; o, como en el caso de mi amigo, se han quedado viudos; pero en el caso de estar casado debe ir a pescar siempre que pueda, tanto si le apetece como si no. Es la mejor forma de combatir el remordimiento.

[Rapalero_Gijón]

a ninguna la veo con la fiebre que nos entra a nosotros, que si tenemos 5 dias libres, los 5 iriamos a pescar pegandonos madrugones, mojaduras, caminatas, golpes.... para acabar sacando igual una triste furagaña y volver mas contentos que un tonto con una piruleta

En tu caso, posiblemente no vuelvas ni con esa triste furagaña  .

Creo el problema radica en que a "Mo" aun no le has regalado un buen libro de cocina 

[Enol]

a ninguna la veo con la fiebre que nos entra a nosotros, que si tenemos 5 dias libres, los 5 iriamos a pescar pegandonos madrugones, mojaduras, caminatas, golpes.... para acabar sacando igual una triste furagaña y volver mas contentos que un tonto con una piruleta

En tu caso, posiblemente no vuelvas ni con esa triste furagaña  .

Creo el problema radica en que a "Mo" aun no le has regalado un buen libro de cocina 

buffff, no te van a caer collejas ni nada la proxima vez que coincidas con ella, lo voy a grabar con el telefono para que las futuras generaciones se lo crean 

[Botikite]

Hunter, está bastante acertado el artículo,te felicito, me gustaría saber en que revista estaba.
Seguro que hay alguna escepción pero pienso que está muy acertado.
La pesca siempre está evolucionando y hay que actualizarse, pero tambien hay que aprender de los que mas experiencia tienen, a mi de vez en cuando me gusta leer cosas de Emilio Sánchez Román y de Julian Tabernero tambien, tienen bastantes libros de pesca, mucha vida recorrida y gran facilidad de escritura, de hecho Julian era profesor de Literatura si no me equivoco. Hay un libro de Julian, La pesca con rapala, que a mi me ha enseñado mucho.
Y luego te los amenizan con reflexiones y comidas de coco que tenemos todos los pescador@s en esta vida muy bien escritos como este que nos has mandado.
No quiero dejar de contaros que tengo una mujer de la que no me puedo quejar lo más mínimo, eso si, del pescado me encargo yo al 100%, llega a casa limpio y cocino yo.
Juan

[Hunter]

Pues la verdad que no me acuerdo, ya que no era mia, me la dejaron y me parecio tan bueno que lo copié.
En cuanto al rapaleo tambien me considero discipulo de Julian Tabernero Iñiguez y de Emilio Fernández Román. Tengo varios libros de ellos y he leido cientos de articulos en revistas.

Saludo.

[AMBRA]

Muy bueno el articulo, yo le pondría una puntualización, existe alguna esposa capaz de comprender que esto es nuestra vida y que no es solo un pasatiempo sino una necesidad fisiológica que la puedes dejar un tiempo de lado pero que al final o te desahogas o te pasa factura (como el pasar por el roca o vas o revientas), estos escasos espécimenes de dicho sexo entre los cuales se encuentra por suerte mi mujer, saben compaginar la vida en común con un cierto tiempo de disfrute en separado, en el cual los dos tenemos que entendernos, ejemplo bastante efectivo: ¿cariño cuando te vas de compras?    no, en serio, es fácil si ella es un pelin comprensiva y nosotros también la cosa es aprovechar los momentos en los que ella este ocupada, cafés con las amigas, compras, visitas a la familia, comidas o cenas de empresa, no se, entenderse.
En mi caso, salgo casi todos los findes y una o dos tarde entre semana y tengo dos niñas, una que cumple 2 meses el día 11 y otra cumple 3 años el junio.   

[Neno]

Cambio mujer sumisa y voluntariosa a la hora de preparar la cena, por una que te acompaña, pesca más que tú, y en llegar te dice;
"Anda majo, vete pelando patatas y haces una tortilla mientras yo me ducho"


No sabeis lo que decís ni la suerte que teneis, que os den 

[jesuspesca]

jejeje, seguro que, a pesar de los gruñidos, Neno es el que se pone más contento cuando su señora le pega un repaso

También me ha hecho mucha gracia el artículo; imagino que, como muchos del señor Fernández vendría en Trofeo Pesca. 'Me quedé viudo hace seis meses, podemos ir de pesca cuando quieras' es una frase que refleja perfectamente el aspecto fundamentalista de la cuestión.

De todas formas el tema no está planteado como 'búsqueda de una solución'; de hecho yo no tengo tan claro que sea bueno o malo en sí mismo que la cónyuge comparta o no el gusto por la pesca. Es cierto que lo que se comparte une; pero también es verdad que las parejas también necesitan sus 'cotos privados' y la pesca puede ser uno de ellos.

El tema que ha planteado AMBRA de la falta de compañeras me parece un buen punto; yo no lo había tenido en cuenta porque para mi la pesca siempre ha sido algo solitario, pero entiendo que también tiene su aspecto social. Seguramente, como dice Caduf la cosa es un poco de todo; pero me pregunto si hay algo más profundo; por eso hacía referencia al aspecto sicológico; es decir, si los hombres tenemos una neurona particular que se excita cuando nos plantamos en la orilla al amanecer caña en mano o si son ellas las que tienen una luz especial que les hace ver que todo esto puede tener su punto divertido pero que en el fondo no deja de ser un juego de niños.
Me da la impresión que los hombres (jóvenes o adultos) somos más dados a los juguetitos; parece que nuestras aficiones, obsesiones y vicios funcionan en el ámbito de acumular, manipular y adorar objetos; ya sean señuelos, carretes; figuritas de dragones y mazmorras; material de fotografía; herramientas de bricolage casero o alerones fardones para tunear.
Es curioso pero apenas conozco foros 'de mujeres'; no creo que sea porque no los haya, sino porque mis búsquedas e intereses nunca me conducen a ellos; salvo el tópico de la cocina no sé a qué se dedican las conversaciones de las señoras en internet. Siempre que aterrizo en algún foro es cosa de tíos; por ejemplo, en los de baloncesto la mayoría de los avatares son unas peaso hembras impresionantes con actitudes a cual más sugerente  (también salen algunos baloncestistas musculosos, pero no suelen tener pintas equívocas); en fin, que todos los foros que visito rebosan testosterona (por cierto, ¿no habrá pescadores, amantes del baloncesto o bricoladores gays? ). ¿A qué se dedicarán las jodías?; no me creo que todo sean charlas sobre la termomix o el macramé ... ¡qué grandes desconocidas son! ¿planean la dominación mundial?, y yo con dos en casa ¡¡ooohhhhh  miedoooo!! ¿cuál es el emoticón del miedorrr?

[AMBRA]

Neno, si tienes una tía que no te la mereces mamonaco y además te acompaña en las salidas, que mas quieres, el único problema son los repasos que te pega de los cuales nos alegramos casi todos.
   

[Aitite]

Jesuspesca, mientras existan las religiones 

¿planean la dominación mundial?,

el problema (si lo es) está solventado.